Nueva York, 13 de octubre de 2025 – Un informe publicado por Forbes el 10 de octubre de 2025 ha destapado la significativa exposición de la familia Trump a las criptomonedas, con el expresidente Donald Trump acumulando una participación estimada en 870 millones de dólares en Bitcoin y su hijo Barron, de 19 años, alcanzando un patrimonio neto de 150 millones de dólares principalmente a través de inversiones digitales. Estas revelaciones, contrastadas con reportajes de ABC News y Vanity Fair, destacan cómo el auge del mercado de criptoactivos ha impulsado el patrimonio familiar en 2.900 millones de dólares este año, en un contexto de volatilidad postelectoral.
El interés de Donald Trump por las criptomonedas ha evolucionado drásticamente desde su escepticismo inicial en 2019, cuando las describió como un «engaño». Durante su campaña presidencial de 2024, Trump adoptó una postura pro-cripto, prometiendo regulaciones más laxas y reservas estratégicas de Bitcoin para Estados Unidos. Tras su reelección en noviembre de 2024, esta visión se materializó en acciones concretas. En julio de 2025, Trump Media & Technology Group, la empresa matriz de la red social Truth Social, invirtió 2.000 millones de dólares en Bitcoin, financiados mediante una emisión de acciones y deuda que atrajo a más de 50 inversores institucionales. Trump posee el 41% de la compañía, lo que traduce su exposición indirecta a 870 millones de dólares en la criptomoneda, según valoraciones al precio actual de Bitcoin, que ronda los 60.000 dólares por unidad tras un repunte del 6% desde la inversión.
Esta cifra ha sido verificada por ABC News en un reportaje del 13 de octubre de 2025, que confirma la tenencia colectiva de la familia en alrededor de 150 millones de dólares en Bitcoin a través de entidades relacionadas, aunque enfatiza que no se trata de holdings directos en billeteras personales. Forbes precisa que, a pesar de un reciente «meltdown» en el mercado crypto la semana pasada –provocado en parte por aranceles anunciados por Trump contra China el 10 de octubre–, el valor se mantiene estable gracias al respaldo institucional.
Barron Trump, el menor de los hijos de Donald y estudiante de segundo año en la Universidad de Nueva York (NYU), emerge como la figura más destacada en este auge familiar. A sus 19 años, Barron ha acumulado 150 millones de dólares, superando incluso el patrimonio estimado de su madre, Melania Trump, en 100 millones de dólares. Esta fortuna proviene en gran medida de su rol como cofundador de World Liberty Financial (WLFI), una plataforma de finanzas descentralizadas lanzada en septiembre de 2024 junto a sus hermanos Donald Jr. y Eric, y con el respaldo de su padre. Barron, quien introdujo a la familia en conceptos básicos como «wallets digitales», posee aproximadamente el 10% de los tokens WLFI, valorados en 525 millones de dólares brutos, aunque Forbes aplica un descuento del 10% por iliquidez en activos no transferibles, resultando en su cifra neta.
Vanity Fair, en un artículo del 29 de septiembre de 2025, corrobora estos detalles y añade que WLFI atrajo 75 millones de dólares de inversión de Justin Sun, fundador de TRON y figura bajo escrutinio de la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC). La plataforma, diseñada para «fortalecer el dólar estadounidense en el ámbito global», ha visto su token WLFI multiplicar su valor tras la reelección de Trump, contribuyendo a ganancias familiares de 1.500 millones de dólares solo de este proyecto. Sin embargo, fuentes como The Wall Street Journal (1 de septiembre de 2025) estiman un impacto total más amplio de 5.000 millones de dólares en el patrimonio Trump, incluyendo licencias internacionales y memecoins como $TRUMP, aunque Forbes es más conservadora al limitar el foco a activos digitales puros.
El impacto en el patrimonio total de la familia es notable: Donald Trump ha ascendido al puesto 201 en la lista Forbes 400 de 2025, con un neto global de 7.300 millones de dólares, de los cuales el crypto representa una porción creciente. Sus hijos Donald Jr. y Eric acumulan 500 millones y 750 millones de dólares respectivamente, impulsados por American Bitcoin, una empresa de minería de cripto que cotiza en bolsa desde 2024. En conjunto, el clan ha visto un incremento de 2.900 millones de dólares en activos digitales en lo que va de 2025, según Forbes.
Estas divulgaciones han avivado debates sobre posibles conflictos de interés, especialmente dada la influencia presidencial en regulaciones crypto. En redes como X (anteriormente Twitter), usuarios han cuestionado el «privilegio nepo-baby» de Barron y la inversión de Sun, pero no se han iniciado investigaciones oficiales por parte de la SEC o el Congreso hasta la fecha. «Trump holds a major position in the digital currency, amounting to an estimated $870 million», afirma Dan Alexander, autor del informe de Forbes, subrayando la magnitud sin entrar en juicios éticos.
Para inversores individuales, este caso ofrece lecciones prácticas: la volatilidad de Bitcoin –que cayó un 5% la semana pasada– resalta la necesidad de diversificar y monitorear regulaciones gubernamentales. Plataformas como WLFI demuestran cómo conexiones políticas pueden acelerar retornos, pero también riesgos de escrutinio regulatorio. Expertos recomiendan consultar divulgaciones financieras públicas antes de invertir en proyectos vinculados a figuras públicas.
En resumen, el giro de los Trump hacia las criptomonedas ilustra la intersección entre política y finanzas en la era digital. Mientras el mercado se recupera, estas tenencias posicionan a la familia como jugadores clave en un sector que podría redefinir la economía global.